viernes, 6 de febrero de 2009

La obsesión por la desigualdad: a falta de datos, buena es la ideología

Leo, algo tarde, esta nota aparecida en el Comercio del 16 de enero pasados, titulada “Pese al crecimiento económico aumentó la desigualdad en el país”, escrita por el periodista Luis Felipe Gamarra. Lo interesante es que se habla de un incremento de la desigualdad en el texto, mientras que la información que sustenta dicha información dista de mostrar que la desigualdad realmente aumento. Veamos.

Lo primero que hay que notar es la permanente confusión del texto respecto al tema eje de análisis. Toda la primera parte se centra en una discusión sobre como el crecimiento no ha llevado a una reducción rápida de la pobreza en las zonas rurales del país. Luego cita a Juan Chacaltana del modo siguiente:
“Si comparamos el gasto familiar del 10% de los peruanos más pobres con el 10% de los más ricos, veremos que la distancia entre ambos se ha elevado dramáticamente. Para Juan Chacaltana, de Centro de estudios para el desarrollo y la participación (Cedep), el ingreso del 10% más rico (al que pertenece menos del 8% del país) incrementó el promedio, lo que generó cifras engañosamente positivas. Por otro lado, la inflación, como lo demostró en el 2007 la Universidad del Pacífico, depende del segmento al que se pertenece. Para el sector E, la inflación del 2007 fue de 8,2%, tres veces más que para el resto de peruanos.”

No me queda claro ni el periodo de referencia ni la fuente de información para tal aseveración. En este post mostré que la evidencia empírica no soporta dicha conclusión. De hecho, el mismo reporte consigna cálculos del coeficiente de Gini para el periodo 2004 y 2007 de 0.42 y 0.42, lo cual en términos estadísticos (considerando intervalos de confianza debido a que los estimados provienen de una muestra y no de datos censales) significa que la desigualdad no cambio.

Luego, en una sub-sección, el artículo menciona lo siguiente:
“Cálculos de Raúl Mauro, investigador de Desco, indican que el Gini tampoco bajó. Sus cifras por departamento señalan que la desigualdad creció en 17 de los 24 departamentos entre el 2004 y el 2007. Por ejemplo, el análisis de Mauro señala que La Libertad, donde existe pleno empleo, la inequidad se elevó, así como la delincuencia, lo que convirtió al departamento en el más desigual del país. Para Javier Escobal, de Grade, y Pedro Francke, de CIES, el país, irónicamente, ha medida que crece, se hace más injusto.”

Aun cuando se presentan datos de desigualdad a nivel departamentos, la afirmación que la desigualdad se incremento en 17 de estos es exagerada. En los casos de Amazonas, Ancash, Arequipa, Cusco, Huánuco, Junín, Lambayeque, Pasco, Puno y San Martin; esto es, al menos 10 de los 17 casos la magnitud de incremento no es sustantiva por lo que es de esperarse que los intervalos de confianza se crucen y por tanto no tengamos evidencia de que el incremento de la desigualdad sea robusto. Por ejemplo, en Arequipa la desigualdad paso de 0.35 a 0.36, un incremento de 2.6%, lo cual es términos estadísticos es simplemente nada, sin embargo el Comercio consigna el caso como uno de incremento de desigualdad. Se necesitan la información respecto a la robustez de los estimados para ser concluyentes al respecto.

¿Que queda del articulo del Comercio? Muy poco. De partida, no aporta evidencia que valide el titular que tiene, además de contradecirse al sugerir que la desigualdad aumento y mostrar que el índice de Gini no cambio en el periodo 2004 y 2007. No tenemos evidencia de que la desigualdad haya aumentado si es que tomamos como punto de referencia 1997, periodo a partir del cual se disponen de estadísticas relativamente consistentes. El articulo incide parcialmente bien en señalar que el crecimiento no ha beneficiado más a los más pobres, aunque lo plantea incorrectamente de modo tal que el argumento termina siendo falso. El argumento correcto sería reconocer que el crecimiento beneficio más en términos absolutos a los no pobres (lo cual no es un resultado inesperado, toda vez que el crecimiento suele beneficiar en primer lugar a los más integrados al sistema económico. El crecimiento nunca es balanceado.), aunque en términos proporcionales los sectores más pobres vieron crecer más rápidamente sus ingresos que los no pobres. Como mostré en el post “la desigualdad no es como la imaginábamos”, el ingreso per-capita promedio del decil mas pobre creció en un 64% entre 1997 y el 2007, mientras que el ingreso promedio del decil mas rico lo hizo en un 9%. Los cálculos pueden descargarse de esta dirección: http://stanislaomaldonado.googlepages.com/ingresopromedio1997_2007.pdf

Ahora, creo que es preciso aclarar los argumentos, sobre todo de quienes defienden la idea de que la desigualdad se incremento, quienes muchas veces parece dejarse llevar más por sus preferencias ideológicas que por la evidencia estadística. Me parece, que hay una serie de problemas que es preciso resolver a fin de tener una discusión basada en evidencias al respecto:

a) El problema del periodo de referencia: muchos de los que argumentan que la desigualdad aumento (ver por ejemplo este post), se basan en datos para el periodo 2004-2007. Efectivamente, para ese periodo existe cierta evidencia al respecto (tal y como muestro en estos datos: http://stanislaomaldonado.googlepages.com/EstimacionesDesigualdad1997_2007.pdf ) pero ello deja de ser cierto cuando consideramos un periodo de referencia más grande. No hay razón teórica alguna que nos diga que el periodo 2004-2007 sea el mejor para juzgar los cambios en la desigualdad.

b) El problema del instrumento de medida de desigualdad: muchos argumentan que las encuestas de hogares son un mal instrumento para medir la desigualdad, porque difícilmente captura bien los ingresos de los más ricos. Siendo ello un argumento atendible, es necesario probarlo empíricamente para el caso peruano. Dicho estudio no existe, por lo que no podemos estar tan seguros que la desigualdad aumento si la evidencia no existe.

En resumen, no existe evidencia para argumentar que la desigualdad aumento en el país. Por el contrario, esta parece no haber experimentado cambio alguno. Los que argumentan que esta si aumento se basan en decisiones metodológicas que no tienen justificación a priori, a no ser que sean preferencias ideológicas. En el caso de los datos a nivel regional, un análisis de robustez es necesario a fin de tener una mejor imagen al respecto al cual habría que agregarle un análisis de su evolución a partir del 2001. Como mencione en mi post al respecto, algo pasó en el 2004 que cambia ligeramente la tendencia. Esto amerita mayor estudio para descartar que el mismo se haya debido solo a cambios metodológicos.

Asimismo, es preciso también abordar la dimensión normativa implícita en el debate. ¿Por qué se considera que un aumento de la desigualdad es malo per se? La forma que termina el artículo del Comercio, al decir que el país se hace más injusto a medida que crece, es sintomático. Desde una perspectiva rawlsiana (ver mi ensayo sobre justicia distributiva), en tanto los pobres se beneficien en términos relativos más que los ricos, uno no podría denominar injusto el crecimiento de los últimos 10 años, en donde el ingreso promedio de los pobres creció más rápido que el de los ricos. ¿Cuál es la teoría moral que sustenta la aseveración de que el país es más injusto hoy?

Confieso que estos tipos de análisis me mortifican. Empezar con un caso muy particular, el de un distrito no beneficiado por el crecimiento, lleva fácilmente a generalizaciones indebidas, que son fácilmente asimiladas para un público no entrenado en los detalles metodológicos. Se necesita evidencia estadística y mostrar la historia completa, no solo la de los perdedores, sino también la de los distritos que se han beneficiado con el crecimiento para tener una imagen más cercana a la verdad. El que las cosas no hayan funcionado para Anchonga no quiere decir que no haya funcionado para ningún distrito de las zonas rurales del país.

5 comentarios:

Rodrigo Velit dijo...

Hola Stanislao:

Hay una buena metodología científica en el apéndice I del siguiente trabajo. Ello sustenta las afirmaciones del contenido del paper.

http://www.up.edu.pe/_data/ciup/documentos/20080722075544_DD0806.pdf

¿Qué opinas?

Saludos,
Rodrigo

Stanislao dijo...

Hola Rodrigo:

Le di una ojeada al apendice que mencionas y me parece que la metodologia del paper esta muy bien armada. El uso de este tipo de estrategias son muy utiles cuando el proposito es describir. Tendria que estudiar con mas detalle el paper para tener una mejor idea al respecto, pero las tecnicas que utilizan son de uso estandar en la literatura sobre pobreza, sobre todo en esta area reciente de crecimiento pro-pobre.

Saludos,

Anónimo dijo...

http://stanislaomaldonado.googlepages.com/EstimacionesDesigualdad1997_2007.pdf

Hola Stanislao:

Estuve viendo este texto tuyo, y no me queda claro que distribución asumiste para el Gini, y de esta manera obtener el intervalo de confianza.

Gracias, Farid

Anónimo dijo...

Supongo que los cálculos han sido efectuados utilizando algún tipo de estimación no-paramétrica de la distribución subyacente de ingresos; y los intervalos de confianza usando bootstrap.

Lo que no me queda claro es cómo se ha tomado en cuenta la estructura de muestreo de la ENAHO. En cuaquier estimación de un funcional de la distribución poblacional (o super-poblacional) usando una muestra compleja con probabilidades desiguales de selección (como la ENAHO), si no se incluye el proceso de selección en el modelo, los resultados van a estar sesgados.

Daniel

Desigualdad dijo...

Hola, con respecto a la desigualdad y a esas revoluciones bolivarianas, les recomiendo mirar esto: Video: Como ser millonario en Argentina?